9/02/2021
Cullera cuenta con un nuevo elemento patrimonial en la zona del mirador del Faro. Se trata de dos manos orientadas hacia el cielo, una escultura que simboliza la resistencia y la defensa de los valores democráticos y de la memoria histórica.
La intervención artística simboliza la lucha en defensa de toda la gente que ha sufrido las guerras. Además, supone la primera parte del que será el posterior proceso de recuperación, rehabilitación y musealización del antiguo refugio antiaéreo situado en la zona del Faro previsto para este año.
“Las manos expresan esa forma de parar las cosas malas que nos pasan en la vida, y que lo podemos extrapolar a los tiempos actuales que estamos viviendo de guerra contra un enemigo invisible pero que está produciendo mucho dolor a la ciudadanía y que esperamos que nos ayude a superar esta pandemia”, manifiesta el alcalde de la ciudad, Jordi Mayor.
La máxima autoridad local también ha hecho inciso en la ubicación ya que “está situada en el refugio militar antiaéreo, un espacio que ha supuesto un lugar estratégico de defensa frente a diferentes guerras: desde los ataques piratas hasta la guerra civil”. Mayor ha añadido que, con la posterior musealización de este refugio, Cullera aumentará su patrimonio histórico y los recursos turísticos de esta zona junto a la Cueva del Dragut y otros elementos que concentrarán un punto de encuentro y un motivo más para visitar la ciudad.
Por otro lado, la regidora de Patrimonio Histórico, Amparo Jover, ha destacado que “es un proyecto con el cual estamos trabajando en los últimos años y que han estado posibles gracias a la financiación de la Diputación de Valencia, con la cual hemos trabajado conjuntamente para que poco a poco sea una realidad”.
Precisamente, el diputado de Memoria Histórica, Ramiro Rivera, ha destacado «la necesidad de que la Diputación siempre apoyen a los ayuntamientos en todos los proyectos que tengan una línea de soporte esencial a la memoria histórica y democrática”, para añadir, que “intervenciones culturales como las que hoy presentamos son importantes para el recuerdo y la justicia de personas que han luchado por valores que ahora parecen consolidados y que les debemos su reconocimiento”, ha destacado.
Según ha explicado su autor, Jesús Martín, “son unas manos que nos ayudan a recuperar la memoria histórica y además en un lugar mágico como lo es el mirador del Faro”. Para Martín, estas simbolizan un escudo de protección contra los ataques continuos que ha sufrido Cullera y la Comunidad Valenciana, pero también como símbolo de esperanza para que no tengamos que volver a vivir ninguna situación similar.
Características
La escultura tiene una altura de 2,5 metros y un pedestal de cemento de 0,5 metros. Está hecha de acero de 5 mm de espesura al estilo cubista, con chapas cortadas y soldadas con hilo de acero. Esta representa dos manos, una de hombre y otra de mujer en representación del pueblo de Cullera que pretende frenar los ataques aéreos.