Imagina un día cualquiera del año. La rutina empieza a pesar y decides hacer una escapada. Piensas en Cullera, aunque solo tienes 24 horas para visitarla.
Lo que podría quedarse en una simple visita rápida a Cullera puede convertirse en toda una experiencia para recordar. Hemos pensado una excelente alternativa para disfrutar de nuestra ciudad y explorar los principales sitios en apenas un días. Te presentamos ‘Cullera en 24 horas’.
Cullera es una ciudad famosa por sus playas, su extenso patrimonio, ocio y gastronomía. Explorar la ciudad en su totalidad merecería, por lo menos, unas semanas. Pero si nos centramos en algunos de los lugares más importantes podemos pasar un día inolvidable rodeados de historia y belleza.
Una de las opciones sería comenzar la visita callejeando por el barrio del Pou, la antigua judería y la morería de Cullera. En los límites del mismo encontrarás el Mercado Municipal, donde se encuentran también los Refugios Antiaéreos de la Guerra Civil. Junto al Mercado, encontrarás la iglesia más antigua de Cullera: la Iglesia Parroquial de los Santos Juanes. También puedes acercarte a la Casa Consistorial y la Casa de la Enseñanza para conocer de cerca la arquitectura exterior de estos dos edificios antiguos
Como no podría ser de otra manera, la visita al Castillo de Cullera es obligatoria. Junto al Castillo se encuentra el Santuario de la Virgen del Castillo, patrona de la ciudad de Cullera. No te defraudarán las vistas excepcionales desde arriba de toda Cullera Hay dos opciones para subir:
- A pie: En ese caso sube por el Camino del Calvario, zigzagueando por el vía crucis que puedes tomar subiendo desde el Mercado Municipal; o bien por la senda de las Torres de la Albacara, que parte desde la Torre de la Reina Mora, al principio del Camino del Calvario. Esta ruta termina en el Castillo, de modo que la puedes seguir igualmente para bajar.
- En coche: Para subir en coche se accede desde la carretera de la Subida al Santuario, que comienza en el barrio de San Antonio.
Seguro que este paseo por el centro histórico te habrá abierto el apetito. Para comer puedes ir al barrio de San Antonio o a la zona del puerto pesquero donde encontrarás una amplia oferta de restaurantes, y por supuesto probar todos los tipos de arroces que hacemos a las mil maravillas.
Estarás cerca del mar, así que después de comer puedes dar un paseo por el Paseo Marítimo o tomar un café en una terraza… relájate y disfruta de las vistas de la bahía.
Podrías concluir el día con una gran aventura visitando la Cueva Museo del pirata Dragut, al extremo norte de la bahía cullerense. Si no lo haces en coche, puedes llegar con el autobús urbano. Cerca de la cueva encontrarás un estupendo mirador y la pequeña Ermita de los Navarros.
Más al norte se encuentra el Faro, cerca del cual encontrará más miradores y paseos con vistas inolvidables de las playas de Cullera.
Al atardecer verás que el cielo y el mar se tiñen de hermosos colores. Pero también puedes ver una bonita puesta de sol desde el río. Por eso, puedes dirigirte al Puerto Pesquero de Cullera, los pescadores ya habrán llegado y puedes probar el estupendo pescado fresco que cocinan los restaurantes de la zona.
Imagina un día cualquiera del año en Cullera. O, mejor aún, no lo imagines y vente, te enamorarás.