Arrozales de Cullera
La provincia de Valencia está llena de contrastes paisajísticos y Cullera es una buena representación de ello. Este municipio costero posee los encantos de la montaña y del mar debido a su privilegiado emplazamiento en el golfo valenciano, cuya diversidad natural hace de Cullera uno de los destinos turísticos más atractivos. La montaña de ‘Les Raboses’, el río Júcar y su desembocadura, los lagos o las dunas son solo algunas de las vistas de las que podremos disfrutar. Aunque, sin duda, los paisajes más autóctonos y representativos de Cullera son los humedales formados por el marjal y los arrozales.
El arroz, principal alimento de la gastronomía de Cullera.
Los arrozales son un símbolo de Valencia en general y de esta localidad en particular, tanto por los platos típicos que obtenemos con el cultivo como por el arraigado oficio en nuestra cultura. Disfrutar de una buena paella o un ‘arroz a banda’ rodeados de este panorama es uno de los mayores privilegios que existen. Nuestros sentidos se desatarán al saborear como nunca estas valencianas recetas.
El origen del arroz
Para conocer mejor el origen y el proceso tradicional e histórico del cultivo del arroz, les aconsejamos que visiten el Museo de Arroz de Cullera. Un museo único en la Comunidad Valenciana que se encuentra ubicado en un lugar singular: la antigua Ermita dels Sants de la Pedra. San Abdó y San Senént dan nombre a esta ermita, ambos santos patronos protectores de las cosechas.
Rutas ecoturísticas por los arrozales de Cullera
Las infinitas llanuras que constituyen los arrozales nos invitan a contemplar su belleza relajada, sin prisas, con unas puestas de sol realmente espectaculares. Pero más allá de su encanto estético, en estos humedales viven especies muy diversas.
La inundación anual del marjal añade el aspecto plateado de los arrozales al ocre, verde y oro que caracteriza el paisaje de los campos de cereales. La suelta de aguas, que permite la paulatina inundación de los campos, es un espectáculo en sí mismo que puede contemplarse desde los miradores de la montaña
Cullera ofrece rutas señalizadas que permiten atravesar los campos de cultivos de huerta, arroz y cítricos. Pueden realizarse tanto a pie por el Marjal Norte que corresponde a la parte del Parque Natural de la Albufera como en bicicleta por el Marjal sur que nace con el río Júcar.
En Cullera no sólo encontraréis una amplia oferta de sol y playa, sino que tendréis la oportunidad de contemplar tradicionales paisajes con un encanto único. ¡Ven a descubrir el paisaje cambiante de los arrozales de Cullera!
